Mercado laboral colombiano: ¿Al fin qué? ¿Mejorando o empeorando? El verdadero reto del posconflicto.

El hecho de que las... tasas agregadas de deterioro laboral registren valores inferiores a los dos dígitos no debe constituir un distractor que impida advertir los claros signos de detrimento del mercado laboral en la mayor parte de los centros urbanos […Además] el caso de Pasto resulta bien elocuente para ilustrar cómo un mercado laboral con tasas de desempleo inferiores a los dos dígitos puede tener su “guardado”, acaso disimular un manifiesto deterioro representado en tasas de subempleo escandalosamente altas […].

9 de julio de 2016

Por: Carlos Javier Barbosa C.

1.     Datos generales. Mes de mayo y trimestre marzo-mayo 2016.

Según los resultados del DANE a partir de la Gran Encuesta Integrada de Hogares (GEIH), durante el mes de mayo de 2016 el volumen de desocupados en el ámbito nacional fue 2.135.000, grueso que representó una tasa de desocupación de aproximadamente un 8,85%, valor bajo para los estándares domésticos. 
Ahora bien, si se toman en cuenta los datos para el dominio nacional según el promedio de los últimos tres meses, marzo-mayo, las estimaciones a partir de la GEIH indican que en 2016 la tasa de desocupación estuvo alrededor de 9,33% y la de subempleo en torno al 29,14%. Al contrario de la tasa de subempleo, la tasa de desocupación ha mostrado la mayor parte del periodo 2001-2016 un comportamiento mucho menos errático, con una inclinación hacia la reducción, aunque hay que indicar que el último trimestre evidenció un aumento apenas perceptible, 0,23%.



Gráfico 1
Tasas de desocupación y subempleo, total nacional 
Trimestre marzo-mayo 2001-2016

Fuente: DANE – Encuesta Continua de Hogares y GEIH

Es claro que las tasas de desocupación y subempleo no se han distribuido de forma uniforme en todo el país: en el dominio “cabeceras” la tasa de desocupación para el trimestre marzo-mayo de 2016 representó un 10,33%, mientras que en “Centros poblados y rural disperso” alcanzó un 5,58%. Por su parte, la tasa de subempleo en las cabeceras estuvo alrededor del 29,16% y en los centros poblados y rural disperso 29,10%. Evidentemente, las cifras para ambos dominios revelan una diferenciación crónica en el sentido de que en el dominio rural las tasas de desocupación han sido marcadamente menores que en las cabeceras, y que las tasas de subempleo del ámbito rural han presentado un comportamiento más volátil que sus contrapartes de cabecera.
Gráfico 2
Tasas de desocupación y subempleo 
Cabeceras y Centros poblados y rural disperso
Trimestre marzo-mayo, 2001-2016

Fuente: DANE – Encuesta Continua de Hogares y GEIH

2.     Datos para las principales urbes. Trimestre marzo-mayo 2016, y promedio trimestral (marzo-mayo) 2007-2016

En cuanto al ámbito urbano, el volumen y los valores de dichas tasas para el agregado de las 13 principales ciudades estimados para el mes de mayo equivalió a 1.051.000 desocupados, a un 9,02% la tasa de desocupación y un 27,15% la de subocupación.
Asimismo, cuando se consideran los datos trimestrales (ya no para mayo) las tasas de desempleo de los 13 principales centros urbanos continuaron mostrando una perceptible tendencia a la baja una vez se repara en su pasó del 10,06% a 9,43%; entre tanto, la tasa de subempleo continuó con su conspicuo comportamiento errático pues registró un leve descenso, pasó de un 28,23% a un 27,51%.
Gráfico 3
Tasas de desocupación y subempleo, 13 ciudades y áreas metropolitanas Trimestre marzo-mayo, 2001-2016

Fuente: DANE – Encuesta Continua de Hogares y GEIH
Al examinar las cifras de los 13 principales centros urbanos con mayor detenimiento se advierte que Cartagena registró la menor tasa de desocupación, 7,87% (ligeramente menor que la del mismo trimestre para 2015 que fue 8,46%), mientras que San José de Cúcuta exhibió la mayor, 14,65% (si bien dicha tasa fue algo menor que la de 2015, que fue el 15,63%). Por su parte, la mayor tasa de subempleo se evidenció en el dominio San Juan de Pasto 38,63%, lo cual continuó reafirmando su carácter endémico. En contraste, Cartagena exhibió la menor tasa de subempleo, 16,46%.
Complementariamente, es muy importante subrayar que dentro de un dominio urbano superior al de las 13 ciudades Quibdó descolló por presentar la mayor tasa de desocupación, 18,46%; 3,1% mayor que la evidenciada en igual trimestre durante 2015. Empero, sin dejar de recalcar el agudo deterioro del mercado laboral, se manifiesta que la gran magnitud de dicha tasa en la capital del Chocó no es algo nuevo; es una característica habitual de su mercado laboral.
En general, pese a los reiterativos anuncios de mayores tasas de interés, de aumentos de la tasa de inflación, de contracción del valor de las exportaciones, de menores ingresos de divisas, de torbellinos internacionales lejanos a propósito de la posibilidad del Brexit… el mercado laboral colombiano ha presentado un comportamiento relativamente discreto (¿impasible acaso?) ya que las tasas de desempleo del trimestre marzo-mayo a nivel nacional (9,33%) o de los 13 principales centros urbanos (9,43%), estuvieron por debajo de los dos dígitos. Pese a esta situación, se recalca que dichas tasas no se han distribuido homogéneamente en el universo urbano; más aún, prima facie las cifras agregadas no revelan explícitamente el deterioro bastante significativo del mercado laboral que han padecido algunas ciudades.
Dentro del universo urbano de las 23 mayores ciudades, durante el trimestre marzo-mayo de 2016 las urbes que evidenciaron menores tasas de desocupación fueron Cartagena, Bogotá, Barranquilla, Bucaramanga y Pasto, cada una con tasas inferiores a los dos dígitos. Por el contrario, las ciudades de mayores tasas de desocupación fueron Quibdó, Armenia, Cúcuta y Popayán, tasas que superaron los 14 puntos porcentuales (Gráfico 4). Sin menoscabo de considerar que la tasa de desempleo es por antonomasia (y por excelencia) el indicador relevante de deterioro del mercado laboral, también se considera imperativo incluir la tasa de subempleo dentro del examen del mercado laboral por cuanto ciudades con tasas de desocupación reducidas o moderadas no implican necesariamente tasas reducidas de subocupación. El caso de Pasto resulta bien elocuente para ilustrar como un mercado laboral con tasas de desempleo inferiores a los dos dígitos puede tener su “guardado”, acaso disimular un manifiesto deterioro representado en tasas de subempleo escandalosamente altas, que para esta ciudad han resultado endémicas (40,0% media geométrica, 2007-2016). Otras ciudades con altas tasas de subempleo pero sin las estridentes tasas de desempleo del grupo de Quibdó y demás son Riohacha y Neiva, tasas que en promedio equivalieron a 38,2% y 37,1% durante el trimestre considerado para los años 2007-2016.
Gráfico 4
Tasas de desocupación 23 ciudades y áreas metropolitanas 
 Trimestre marzo-mayo, 2016

Fuente: DANE – Encuesta Continua de Hogares y GEIH

Se reitera: el hecho de que las anteriores tasas agregadas de deterioro laboral registren valores inferiores a los dos dígitos no debe constituir un distractor que impida advertir los claros signos de detrimento del mercado laboral en la mayor parte de los centros urbanos, tal como lo atestiguan los promedios geométricos de las altas tasas de desempleo (Gráfico 5), y las de subempleo constatados durante el periodo 2007-2016, inclusive. Claramente, la realidad de la situación general de este mercado es ambigua: los últimos datos muestran un collage de resultados, pues los indicadores de unas ciudades como Bogotá, Cali, Manizales o Cartagena, continúan mejorando, o al menos no han empeorado, mientras que otros como los de Ibagué, Montería, Popayán, Valledupar, Riohacha o Santa Marta desmejoraron. Con todo, la situación de alto desempleo ha presentado características endémicas, alarmantes para unos estándares decentes, en Quibdó, Popayán, Armenia, Ibagué y Pereira, a la luz de lo evidenciado a partir de 2007.
Gráfico 5
Promedio Tasas de desocupación 23 ciudades y áreas metropolitanas 
Trimestre marzo-mayo, 2007-2016

Fuente: DANE – Encuesta Continua de Hogares y GEIH

3.     Datos ocupación según rama de actividad económica. Trimestre marzo-mayo 2016.

Al examinar los datos agregados del total nacional de la estructura ocupacional según rama, las cifras muestran que la mayor parte de los ocupados se desempeñó en el sector del “comercio, hoteles y restaurantes” en una proporción equivalente a un 27,71%, seguida en menor magnitud por las ocupaciones en los renglones de “servicios comunales, sociales y personales”, 19,95%, en el “agropecuario y silvicultura y pesca”, 15,39%, y la “manufactura” que equivalió al 11,49%. Los otros sectores que evidenciaron pesos significativos fueron el “transporte, almacenamiento y comunicaciones”, 8,28%, las “actividades inmobiliarias, empresariales y de alquiler”, 7,89%, y la “construcción”, 6,30%. A propósito, el sector de “intermediación financiera” que tiene un peso muy importante dentro de la composición del producto interno bruto, apenas ocupó al 1,42%, a nivel nacional.   

Gráfico 6
Estructura % de la ocupación según actividad económica
Total nacional, Cabeceras, Centros poblados y rural disperso 
Trimestre marzo-mayo, 2016

 Fuente: DANE – Encuesta Continua de Hogares y GEIH

Como es de esperarse cuando se analizan los datos para los principales centros urbanos colombianos, se advierte una variación significativa de la estructura de la ocupación para el agregado de las 13 principales una vez se compara con el agregado nacional, todo en vista del gran peso que tienen las actividades agropecuarias, la caza, la pesca y la silvicultura. En adición a la gran importancia que tienen las actividades relacionadas con el comercio, los hoteles y restaurantes que representaron el 30,35% de la ocupación, los siguientes renglones que registraron mayores proporciones de ocupación correspondieron a  los servicios sociales, comunales y personales con una participación de un 22,54%, la manufactura un 15,60%, los servicios inmobiliarios, empresariales y de alquiler un 12,29%, y el transporte, almacenamiento y comunicaciones un 9,27%. La construcción logró un 6,18%. Nuevamente, no deja de reverberar la escasa participación de la ocupación de la intermediación financiera dentro de la órbita de los 13 principales centros urbanos, toda vez que apenas representó el 2,21%.
Gráfico 7
Estructura % de la ocupación según actividad económica  
13 Ciudades y áreas metropolitanas   
Trimestre marzo-mayo, 2016

Fuente: DANE – Encuesta Continua de Hogares y GEIH

4.     Datos ocupación según posición ocupacional. Trimestre marzo-mayo 2016.

Los datos agregados del orden nacional acerca de la estructura de la ocupación según posición ocupacional revelan que en Colombia continúa predominando la ocupación, o la condición, del “cuenta-‘propismo’” toda vez que la posición ocupacional “cuenta propia” representó un 42,78% en el trimestre marzo-mayo de 2016. Una participación levemente menor la presentó la posición ocupacional de los ocupados particulares dependientes con un 39,41% del total. Los ocupados del gobierno dieron cuenta apenas de un 4,07%; los patrones o empleadores un 3,66%, proporción muy similar a la de los ocupados familiares (¿ayudantes?) sin remuneración (3,61%). Las otras ocupaciones de algún peso perceptible la constituyeron el empleado domestico (3,17%), y el jornalero o peón (2,71%).  
Gráfico 8
Estructura % de la ocupación según Posición ocupacional
 Total nacional, Cabeceras, y Centros poblados y rural disperso   
 Trimestre marzo-mayo, 2016

Fuente: DANE – Encuesta Continua de Hogares y GEIH
Por último, al verificarse el ejercicio inmediatamente anterior para el dominio de los 13 principales centros urbanos se advierte (invierte) una ligera variación de la composición del empleo según posición ocupacional: las dos categorías ocupacionales que más participación tuvieron dentro del total del empleo en los 13 principales centros urbanos fueron la de los ocupados particulares dependientes que representaron un 50,54%, y la de los cuenta propia que tuvo un peso de 36,06%. Los empleos registrados en las otras categorías ocupacionales que tuvieron algún peso perceptible la constituyeron el empleador 3,87%, el obrero o empleado del gobierno 3,81%, el empleado domestico 3,30%.   
Gráfico 9
Estructura % de la ocupación según Posición ocupacional.       
    13 Ciudades y áreas metropolitanas. Trimestre marzo-mayo, 2016

Fuente: DANE – Encuesta Continua de Hogares y GEIH


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